Bueno, un día más, salir a las calles, batallar, trabajar mucho solo para cubrir tu alquiler y con suerte algo para calmar los sueños y el estómago, soportando todas las pérdidas que la vida te libera, haciendo cuenta del activo y pasivo restante en aquellos billetes para comprarte un poco más de vida..sólo un poco más.
Andás feliz últimamente, cobraste el sueldo, aunque por pura ilusión te creés dueña del mundo, sabiendo que servís sólo para trasladar ese activo a cuotas de facultad, alquiler, luz, agua, comunicación, comida, etc.
Cuando te das cuenta, tus manos se vaciaron nuevamente y estas lista para batallar otro mes, cuando de repente, parpadeando dos veces, te encontras en la calle, bajando el micro, a cuadras de tu destino.
La muerte andando en moto se acerca súbitamente a preguntarte una dirección o simplemente acercarse más para verte mejor.
¿A cuántas personas cruzas todos los dias?
¿De cuántos ladrones corriste por miedo?
¿A cuánto llegaste este mes para solventar tus propios sueños, pagándote la vida? Cuando la "muerte disfrazada de azar" te interceptó en su camino...
Lili es una chica como yo, como vos, yo fui asaltada hace menos de un mes por un motoqueiro o "motochorro" como me enteré se los llaman.
Y no es explicable la impotencia resentida, posterior al trueque de mercancía por tu vida.
Pero estoy harta, y lo hago público. Estoy harta de que te roben los sueños, porque no se trata de dinero, de aparatos telefónicos, de billeteras, o la cartera.
Se trata de que te ufanen los papeles que srvían de ticket a otro mes más de lucha, de esfuerzo, de ganas de continuar, de esperanzas por ver un país mejor, que te quiten el aire y las ganas de seguir viviendo. Debo reconocer que en 22 años nunca me habían asaltado así en Paraguay. También creo sinceramente que el poder mental y las energías atraen y repelen ciertas cosas (que profundamente espero sea lo que te salve a vos, lector).
Pero es el 10º asalto q me entero en menos de un mes y medio. Todos allegados de cierta forma, porque en Paraguay somos todos medio parientes...
Se trata de que te importes y repudies el que no puedas más salir a la calle.
¿A quien le importa Lili?
Venia ella haciendo los cálculos más inteligentes para administrar su sueldo del mes cuando un ladrón de la esquina le intercepta y con dos estocadas en el estómago la despoja de todo su dinero y no solo de eso sino de sus sueños, de sus seres queridos y de su salud.
¿A quién le importa Lili? Hoy, debatiéndose entre la vida y la muerte, las dos heridas que parecían ser rasguños resultaron ser tan serias que dañaron órganos principales. Ahora, con pronóstico reservado, en Terapia Intensiva, en coma, y cada uno de sus íntimos haciendo cálculos para brindarle una atención médica diferenciada que de hecho la necesita y ya.
¿A quién le importa Lili? ¿Quién es el responsable? ¿El ladrón de la esquina? De ese amigo no sabemos nada. ¿Los políticos? Están todos de campaña. ¿Las barras bravas de Cerro y de Olimpia? Están de festejo. Si total, es un caso más. Y si llegase Lili a capear este trance difícil quedaría por siempre con daños físicos y psicológicos. Y la vida sigue igual… Y la vida sigue igual.
¿A quién le importa Lili…? Bueno, tengo que decir que si le importa a Vale (su madre) que todavía esta reponiéndose de la muerte de su esposo (hace 1 mes); a sus dos hijas, y a otros seres cercanos que me consta que si les importa.
Ella, ¿no quiso entregar su dinero? O directamente, ¿arremetieron contra ella sin mediar palabra? Si fue lo primero, estoy contigo Lili, porque entregar sin resistencia ¿es la solución (como se recomienda)? ¿No es demasiado fácil para el ladrón de la esquina? Estamos contigo Lili! No era solo el sueldo. No es cuestión de dinero, sino de sueños, principios, es cuestión de honor... no era solo el vil metal.
Si éste mensaje lo leíste fue para que nos des fuerzas:
0981 771509 Ninfa de Notario.
0981 832808 Gilda de Ferreira.
No tengas miedo, sí valor para enfrentar la realidad y cambiarla desde donde estés. Informáte, asociáte, expresáte, decí algo, movéte, ayudála, ayudáme.
Contigo ya somos dos.
Que el miedo no paralice nuestros sueños..que nuestras manos sanen las heridas de Lili.
"Le pregunté a aquel viejo: ¿dónde está Jesús?...y me pasó un espejo" F. Cabral.
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